La sonrisa es una carta de presentación de gran importancia para una persona en una sociedad cada vez más exigente, por eso es fundamental mantener unos correctos hábitos de higiene oral para tener una boca limpia y saludable.
Sin embargo, a pesar de que nos cepillamos tres veces al día y utilicemos la seda dental correctamente, siempre quedan zonas de difícil acceso para tener unos dientes realmente limpios, en estos lugares es donde empieza a generarse la placa bacteriana que no podemos retirar con nuestra rutina de higiene diario.
En estos casos es donde debemos acudir a realizar una limpieza dental con el odontólogo, con el fin de retirar esa placa y sarro acumulados, que de otra forma, van a seguir presentes en nuestra boca y pueden ocasionar afecciones como las temidas caries o una gingivitis.
La limpieza dental se divide en dos tipos, según las necesidades que presenta el paciente al momento de realizarlo. La primera es la profilaxis y es realizado con un cepillo giratorio con el fin de lavar los dientes y remover la placa bacteriana suave adherida a ellos. Además, permite retirar manchas ocasionadas por la ingestión de productos como el café y el vino.
El segundo tipo es el detartraje y es una limpieza más profunda, realizada con una pieza sónica o de ultrasonido, con el fin de retirar el sarro o la placa calcificada adherida a los dientes y debajo de las encías. En la primera consulta por limpieza dental es normal que se realicen juntas en caso de requerirlo el paciente.
Además de estos dos tipos, existe un tercer tipo de limpieza dental que se realiza únicamente cuando se presenta la enfermedad periodontal, se le conoce con el nombre de curetaje o raspado radicular. Se utiliza cuando la placa bacteriana ha logrado penetrar hasta las bolsas periodontales, que son el espacio entre el diente y la encía donde se forman las bacterias, ocasionando la inflamación de la encía y el sangrado como síntomas característicos de la gingivitis.
El curetaje consiste entonces, en realizar un raspado de la placa bacteriana presente en la raíz del diente para prevenir una afección más grave a la salud oral. Para saber si un paciente requiere de la realización de este procedimiento, se debe visitar al odontólogo que realiza una revisión dental y determina si las bolsas periodontales se encuentran sanas o no, por eso es importante tener la revisión periodontal mínimo cada seis meses.
Los expertos recomiendan realizar una limpieza dental cada seis meses, para prevenir las posibles afecciones que se puedan causar por culpa de la placa bacteriana y prevenir la aparición de enfermedades como las caries o la gingivitis.
Queremos recordarles a nuestros pacientes que la limpieza dental forma parte de la buena rutina de higiene dental y que es importante realizarla con regularidad para tener una sonrisa limpia y sana. En Savanna Clínica Odontológica trabajamos por tu salud oral y te brindamos atención oportuna y profesional de acuerdo con tus necesidades. ¡Te esperamos!